Como toda actividad social, la investigación en el campo de las ciencias sociales se institucionaliza por la acción de los individuos, instaurando ciertos mecanismos que regulan -a través de pautas organizacionales definidas- su quehacer social e institucional. Es así que la investigación social desarrollada en las instituciones de educación superior es experimentada por sus actores como una realidad establecida y objetiva que antecede al individuo actual, una realidad sujeta a una clara definición de roles, situaciones y comportamientos. Desde una perspectiva sociológica, y ante a la injerencia de las actuales tecnologías de la información y la comunicación, en este trabajo se exploran los obstáculos y las posibilidades que enfrenta la condición institucionalizada de la investigación social y la de sus actores en sociedades con distintos tipos de desarrollo. Con tal propósito nos detenemos en el enlace de cuatro dimensiones del problema: la expansión y dispersión de las ciencias humanas y sociales; la institución como marco normativo de la organización de la actividad de investigación; el académico-investigador como principal actor y, por último, la función del "par académico" como árbitro de una competencia más institucional que cognitiva.
Palabras clave:
ciencias sociales, investigación social, instituciones de educación superior, marcos normativos, actores de la investigación social
Pacheco-Méndez, T. (2017). La investigación social como actividad institucionalizada y como experiencia socio-histórica. Cinta De Moebio. Revista De Epistemología De Ciencias Sociales, (58). Recuperado a partir de https://revistaderechopublico.uchile.cl/index.php/CDM/article/view/45108