El presente texto tiene por objeto proponer algunos presupuestos metodológicos para el control de decisiones administrativas adoptadas con inteligencia artificial. Si bien el uso de este tipo de herramientas en el ejercicio de potestades públicas plantea nuevos desafíos, esto no debe entenderse como un terreno que escapa de los elementos clásicos de control público. Por el contrario, una interpretación dinámica de los criterios y perspectivas empleados tradicionalmente en el control de estas potestades constituyen insumos capaces de ofrecer algunas respuestas a estas interrogantes (o al menos, una primera aproximación a ellas). Se propone entonces una metodología centrada en el análisis del impacto que la inteligencia artificial podría significar en la juridicidad de los distintos elementos abordados en la “teoría general del acto administrativo”. De esta forma, la descomposición intelectual de la actividad administrativa formal en función de sus elementos esenciales contribuye no solo a una mejor comprensión de la incidencia de la inteligencia artificial en tal actuación, sino que también en la definición misma de su juridicidad.